miércoles, 13 de enero de 2016

los conejos se están poniendo a bailar


una canción de Astro
cruza la cordillera
y se me clava, justo acá
(en los pies)


la música es sonido, y punto

                        ♪ hey na na hey na na 
hey na na hey na na ♪

sábado, 9 de enero de 2016

pineapple princess


La dama del ananá
la cáscara gana
calmar las balas
saltar las trancas
cansada andaba la flaca
tanta carga,
tanta mala racha
danzaba para matar la falta
pasaba mansa
cargaba amarras
la paz tarda
calma la llaga
la paz ya andaba
allá la dama
la paz alcanzada
para amar

martes, 5 de enero de 2016

Los Tabaleros y mi adiós a Marie


No, no voy a volver a decir lo mismo que quienes pasaron por aquí han leído tantas veces. Voy a evitar hablar de lo bien que hacen lo que hacen, de cómo aún me asombra la destreza de los muchachos en las cuerdas, de la fuerza de la voz de Jose, de cómo suena ese bombo legüero, de cómo agregar bajo sumó para bien y esas percu psicodélicas más todavía. Voy a obviar lo obvio, que en el escenario del Uniclub la volvieron a descoser y el show fue impecable e implacable. No voy a decir que ¡TUY! fue una apuesta fuerte que salió ganadora y de cómo Los Tabaleros están entre las bandas que más destaco de la escena off del circuito musical independiente.

Diré sencilla y brevemente, que fue una fecha cargada de emoción, porque los mismos que unieron nuestro camino ahora musicalizan la despedida. Lo bueno en este caso fue que tanta energía sumada a esa barra brava de taba-fans que improvisaron cánticos de cancha de manera descontrolada nos distrajo del dolor del adiós. Marie y yo bailamos de principio a fin, y más! Coreamos cada canción con la garganta prendida fuego, como Los Tabaleros nos enseñaron, y disfrutamos de la última fecha juntas como si el final fuera una farsa. Mi fiel compañera y entrañable amiga estará presente en cada canción, y seré su embajadora en todas las taba fechas por venir, amén! (o hasta que a ellos les toque irse de gira por allá e imaginen ese reencuentro!)

qué show más raro - El Gnomo despide Las Mil y un Canciones en Vinilo



Quizás porque las despedidas sean algo complejo. Quizás porque no es cierto que existan, porque aunque se decida despedir un disco, las canciones van a estar siempre ahí, en algún lado, enredadas en alguna siesta en el rosedal, en algún viaje en ese bondi que nunca más tomé, en alguna tarde donde la ficha cayó de una vez y para siempre.

Sea como fuere, es principio de noviembre (2015, claro está) y El Gnomo cita en Café Vinilo para despedir Las mil y un canciones. Se hace acompañar por La Filarmónica Cósmica y la cosa ya arranca diferente. Pide conexión, pide oscuridad y un Om general. Hay invitados, suenan temas del disco y temas aún no editados. Pero la línea temporal del show se rompe en algún momento, y todo sucede fuera de tiempo y de espacio, como si despedirse de un disco fuera una trampa. “El amor es una opción inexistente”, reflexiona el Gnomo y se olvida que estamos acá, dándolo. “Qué show raro”, dice algún músico. Y todos reímos, aplaudimos, coreamos y cantamos.

Ensayo general y a corazón abierto. Así me gustaría resumirlo. Porque el corazón es así, raro, difícil de entender y más aún de explicar, pero siempre cálido. Todo termina abrupto, sorpresivo. Entonces quizás sí, quizás sí existan las despedidas y los finales. Sin que nadie quite que lo que pasó fue cierto, y sin que nadie pueda evitar que otros lo tomemos para armarnos estos cuentos.

lunes, 4 de enero de 2016

Ojos que ladran en el CCR


Era domingo, el calendario marcaba mediados de noviembre, y aún entrada la tarde el calor se hacía sentir. El sol pegaba de lleno en el patio del aljibe del Centro Cultural Recoleta donde la prueba de sonido estaba concretándose de manera natural y entretenida. Cálidas pero feroces, las féminas de la escena rondaban el lugar. El horario ATP sumó niños y mate, y cuando todo listo estuvo, arrancó Lu Martinez con su guitarra y su inmensa gracia. Convocada para abrir la presentación del disco de la Paula Maffia Orgía, Lu hizo un repaso por los temas incluidos en Realmente Grande, el LP donde debuta como solista y coquetea con el funk y el soul, sin dejar afuera al rock y al swing. Mete un cover de Luismi, para arengar a la masa. Su humildad, sentido del humor y buena vibra nos tienen a todos bien predispuestos. Con letras atrevidas y divertidas, con un muy buen manejo del improvisado escenario y su forma sencilla de conectar hizo las delicias de este principio.

Esos rulos indomables e inconfundibles, esa boca, siempre roja e inmensa. Esa femineidad al palo que cautiva y arrasa  con todo a su paso, su manera de llevarse al mundo puesto en el bolsillo o en el borde de sus borcegos. Tanta belleza, tanta frescura, esa sonrisa que es inmensa y perfecta, y que asoma a cada rato. Esa, ella, Paula Maffía, se planta al frente para la presentación oficial de Ojos que ladranen el marco del ciclo "Discos Nuevos" de Estudio Urbano. Con banda completa e invitados de lujo: Rosario Baeza, Lucy Patané, Nahuel Briones, Jazmín Esquivel, Ignacia. Tocan todos los temas del disco, y suena como si le hubieran dado play. Prolijas, intensas, decididas. Un discazo, sin ninguna duda, que se atreve. Una banda que se las trae. Imposible no amar las canciones de esta loba y su jauría.